✅ ¿Por qué es importante el networking para una marca personal?
Hay una frase de Dale Carnegie (uno de los mayores expertos en relaciones públicas de la historia) que resume muy bien la idea que queremos transmitirte con este post:
“Se pueden ganar más amigos en dos meses si se interesa uno en los demás, que los que se ganarían en dos años si se hace que los demás se interesen por uno”.
Porque el networking va justo de eso. De conectar con otros profesionales y forjar relaciones:
- Sinceras.
- A largo plazo.
- Win-win.
Esto mismo es lo que debemos fomentar en las estrategias de posicionamiento de marca que diseñamos para nuestros clientes de consultoría.
Y es que cuando haces networking de forma honesta, consigues:
- Acceder a nuevas oportunidades: proyectos que jamás se te hubieran ocurrido o que sería imposible abordar en solitario, sinergias con otros negocios, etc.
- Más visibilidad y autoridad: porque hay otros profesionales que hablan de ti, recomiendan tus servicios, comparten tus contenidos…
- Más ventas: como consecuencia de lo anterior. El hecho de que otros profesionales te recomienden refuerza tu credibilidad de cara a tu audiencia y hace que estén más abiertos a comprarte.
Y sobre todo, consigues conectar con personas que te aportan no solo en lo profesional, sino también en lo personal.
Pero ojo.
Esto no significa que no podamos (y debamos) forjar estas relaciones con una mentalidad estratégica.
✅ Los pasos previos para utilizar el networking en una estrategia de personal branding
No se trata de hacer contactos, sin más.
Antes de poner en marcha cualquier acción de networking es importante:
- Definir los objetivos a alcanzar.
- Identificar los profesionales con los que a tu cliente le interesa tener relación.
- Planificar.
Te lo explicamos punto por punto.
👉 1. Márcate objetivos
Lo primero que debes preguntarte es: “¿Cuál es el propósito de mi cliente con esta estrategia?”.
Puede ser:
- Mejorar el posicionamiento de su marca personal.
- Asistir a un evento concreto como ponente.
- Ofrecer un directo para la audiencia de una persona determinada, porque sabes que allí puede haber potenciales clientes.
- Proponerle una colaboración a esa persona para ofrecer servicios conjuntos, incluir un bonus de ese profesional en su curso…
El objetivo que persiga tu cliente en cada momento marcará el curso de toda la estrategia.
👉 2. Piensa con quién quieres relacionarte (y con quién no)
¿Con quién necesita entrar en contacto tu cliente para cumplir los objetivos que habéis definido?
Si, por ejemplo, su propósito es asistir a un evento como ponente, tendrá que conectar con personas involucradas en su organización.
El problema es que responder a esta pregunta no siempre es sencillo.
Si a tu cliente le cuesta identificar los profesionales con los que le gustaría colaborar, puedes hacer el camino inverso: identificar primero a aquellos con los que nunca lo haría.
Te lo explicamos con un ejemplo:
Imagina que uno de los valores que definen la marca de tu cliente es la honestidad. Entonces, un perfil con el que no sería coherente que se aliase serían marcas que han recibido críticas por vender sus productos con promesas irreales.
Hacer este ejercicio puede darle a tu cliente mucha claridad.
👉 3. Planifica las acciones a ejecutar
El siguiente paso es establecer la hoja de ruta de la estrategia de networking. ¿Qué va a hacer tu cliente para forjar una relación con ese otro profesional?
Esto incluye:
- Las acciones a realizar dentro de la estrategia: ¿va a comentar sus publicaciones en Instagram? ¿Enviarle un mensaje directo? ¿Proponerle hacer un contenido colaborativo? Luego te daremos algunas ideas.
- La periodicidad: con qué frecuencia va a dejarle comentarios, en qué momento establecerá un contacto más directo, etc.
De nuevo, no se trata de “forzar” la relación, sino de lograr que acabe surgiendo de la manera más orgánica posible.
✅ 4 vías para ampliar tu red de contactos
Ya tienes claro qué necesitas para hacer networking; ahora te falta el cómo.
Te damos algunas ideas para conectar con otros profesionales.
👉 1. Las redes sociales son el nuevo “patio de vecinos”
La inmensa mayoría de los negocios online tienen presencia en, al menos, una red social, así que son un lugar perfecto para conectar con ellos.
Puedes:
- Entrevistar a personas con las que quieres tener relación.
- Comentar sus publicaciones y sus stories.
- Compartir sus contenidos, mencionar sus cuentas en tus stories, etc.
- Enviarles mensajes directos.
Para hacer este ejercicio cualquier red social es interesante. Sin embargo, es verdad que LinkedIn destaca especialmente como herramienta para hacer networking.
Después de todo, esta plataforma está diseñada precisamente para ayudar a los profesionales a conectar entre sí.
👉 2. El mundo digital está bien, pero desvirtualizar es aún mejor
Internet es una herramienta vital para el networking, eso nadie lo niega.
A través de la pantalla puedes conocer a muchísimas personas de cualquier parte y llegar a crear lazos estrechos y sinceros.
Pero la realidad es que la mejor manera de forjar una relación estrecha sigue siendo el networking presencial.
Por eso a veces es interesante desvirtualizar a esa persona con la que llevas tiempo intercambiando mensajes a través de las redes sociales.
Una buena opción es aprovechar para conoceros cuando se celebre un evento al que ambos tengáis pensado ir, por ejemplo. Pero en algunos casos (sobre todo si tienes contactos que vivan cerca de ti), puedes organizar una quedada presencial para conoceros mejor y poneros cara fuera del mundo virtual.
👉 3. Asiste a eventos…
Antes de la irrupción del mundo online, acudir a eventos profesionales era la mejor manera de entrar en contacto con otros profesionales.
Y hoy en día este tipo de encuentros siguen siendo una opción muy potente para hacer networking.
El motivo es precisamente lo que te decíamos en el apartado anterior: cuando conoces a alguien en persona, es mucho más fácil que se genere una relación de confianza con ella (que luego podrás mantener y desarrollar a través de la red).
Claro que esta fórmula también tiene sus desventajas.
El principal es que un evento tiene una duración limitada. Eso significa que tienes que encontrarte con esa persona y conectar con ella en apenas unas horas.
Por eso es interesante:
- Tener preparado un elevator pitch personal: normalmente el elevator pitch se utiliza para captar ventas, pero también se puede adaptar para hacer networking.
- Investiga quién va a acudir: no hay que dejar nada a la improvisación. Averigua qué otros profesionales acudirán, quiénes serán los ponentes… Hoy en día esto es muy fácil de saber, porque la mayoría publica en sus redes sociales los eventos a los que piensan ir.
- Empieza a trabar relaciones antes del evento: si investigando has descubierto que una persona con la que a tu cliente le interesa conectar estará en el evento, puede ponerse en contacto con ella previamente y entablar una conversación. Esto le permitirá romper el hielo y que, una vez se encuentren en persona, todo fluya con más naturalidad.
Eso sí, no se trata de que tu cliente esté en todos los encuentros de su sector.
Al diseñar la estrategia es importante que defináis juntos a cuáles le interesa ir realmente.
Claro que todavía podemos ir más allá.
👉 4. …o crea el tuyo propio
Organizar un evento no solo te da mucha autoridad, sino que también es una manera “fácil” de acercarte a esas personas con las que quieres relacionarte. Por ejemplo, invitándolas a participar como ponentes.
Puedes hacerlo en formato:
- Online: esta opción suele ser la más económica y sencilla a nivel de organización. Además, al ser online puedes traer a ponentes de cualquier lugar sin que la distancia sea un obstáculo. El problema es que, con este formato, se pierde el impacto de conocerse cara a cara que te decíamos antes.
- Presencial: aquí las ventajas e inconvenientes se invierten con respecto al online. Puedes conocer a muchas personas cara a cara, lo cual hace más fácil que conectéis y que la relación perdure. Por contraparte, la dificultad para organizar el evento y la inversión pueden ser mucho más altas.
Esta opción es la más compleja, pero a cambio puedes conseguir muchísimos contactos y disparar tu visibilidad.
✅ ¿Ya tienes claro cómo aplicar el networking en tus estrategias de posicionamiento de marca personal?
Hacer contactos significa abrirte puertas.
Por eso el networking es uno de los pilares de las estrategias de posicionamiento de marca que enseñamos en Soy Personal Brander, el programa estrella de nuestra escuela.
En él te explicamos todo lo que necesitas saber para ofrecer servicios como consultor digital de marca personal, incluyendo:
- Cómo identificar los elementos diferenciadores de la marca personal de tu cliente.
- Los pasos para trazar las estrategias de monetización y comunicación.
- Claves para diseñar tu propio proceso de consultoría.
Todo ello con una metodología validada con más de 1000 clientes y diseñada por la fundadora de la escuela, Irene Milián, que te permitirá diseñar estrategias de marca efectivas y rentables.
Si quieres saber más, en este enlace tienes toda la información sobre el programa.
¡Nos vemos dentro, compi! 😉